Juicio Genocidas Armada Bahía Blanca
Resumen Audiencias 11 y 12 de noviembre 2014
“La Memoria se Construye a través del Conocimiento”
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El Martes
11 de Noviembre declararon 8 Testigos a lo largo de toda la jornada.
Por el caso
del Conscripto cordobés desaparecido
Guillermo Aníbal Aguilar, declara en primer término, el ex soldado José Antonio Rutti, quien realizó el
servicio militar con Aguilar en el Batallón de Infantería de Marina, Baterías
de Punta Alta. A fines de septiembre del 76, les dan de baja, luego de 18 meses
en ese lugar. Al momento de salir para Bahía Blanca donde les serían entregados
los pasajes para volverse a Unquillo su ciudad natal, sus compañeros ven como Aguilar
es apartado por el Oficial superior Lacoste y dos personas más, vestidas de
militar, en el patio de Armas. Ellos se quedan con su bolso, presumiendo
encontrarse con él en la estación, cosa que no sucedió. Cuando llegan a Córdoba,
van a Unquillo a devolver el bolso y ver
a Aguilar y se enteran por su padre que nunca regresó a su casa. Cuenta que
tanto Aguilar como él, militaban en el peronismo. “Después de todo lo que se
vivió en este país, no me cabe ninguna duda que lo secuestraron ahí, lo
separaron de la familia, de todo, no me cabe ninguna duda. Hoy no me cabe duda
que lo desaparecieron en ese momento, cuando se despidió de nosotros, no llegó
nunca a Bahía Blanca”.
En segundo
lugar declara la hermana del desaparecido Aguilar, Lucrecia Yolanda Aguilar. Cuenta que su hermano, durante casi 2
años de Servicio Militar en Punta Alta, les escribía una carta todos los meses
y que la última en Septiembre de 1976, les comunica que tenía la fecha para su
Baja del Servicio Militar. A fines del 76, van sus compañeros a Unquillo a
buscarlo, pensando que lo encontrarían allí. Esos compañeros les cuentan a la
familia que en el momento de la baja, Aguilar es requerido por Lacoste y no lo
ven más. Su madre viaja a Punta Alta, para saber su paradero y le informan “Señora,
su hijo salió de baja”. Este hecho significó la destrucción de su familia. “La desaparición
de mi hermano, con lo que ello implica para una madre y un padre, desencadenó
en que ella cayera en un pozo depresivo, ante la impotencia de no saber qué fue
de él, mi padre sufrió de una hemiplejia por un Acv, mi otro hermano se tuvo
que exiliar, y pasaron 20 años para que pudiera volver a verlo. Fuimos víctimas
todos”. “Mi hermano estaba militando en
la Juventud Peronista, sé de sus ideales de Justicia Social sobre todo, era
sumamente generoso.” Militaba allí en Unquillo. La familia también sufrió persecución
tuvieron un allanamiento con muchos efectivos, “rodearon la casa, entraron de
prepo a los empujones y pedían por mi hermano.” Eso fue 1 o 2 meses antes de su
desaparición. “Para mí, mi hermano nunca salió de la Base, fue retenido por
Lacoste y a partir de allí no lo vieron nunca más”. “Necesito y pido a ustedes
y a quien corresponda juzgar a estas personas nefastas que tuvimos en el país,
que sean juzgadas y que paguen por todo este daño que hicieron. La única palabra
que les cabe, es que son unos Genocidas”.
En tercer
lugar fue el turno de la declaración de Roberto
Horacio Ferrero, por el caso del secuestro de Diana Silvia Diez, su cuñada. Diana es secuestrada del auto que él
manejaba, luego que la pasó a buscar por su trabajo en Entel. Los intercepta un
auto Chevrolet 400, se bajan 2 personas, la sacan a Diana de adentro de su auto
y la meten en el Chevrolet y se la llevan. No se supo mas nada hasta el 4 de
febrero que fue liberada. “Fuimos a verla y era una mezcla de tristeza y
alegría, estaba muy deteriorada, los tobillos marcados, en muy mal estado”. Diana
les contó que fue sometida a todo tipo de vejámenes, y que estaba segura que
había estado en Punta Alta. Entre las gestiones que realizaron para buscarla
durante su desaparición fueron a la Curia a ver a Mayer y a Ognenovich,
preguntaron por Diana y también por Horacio Russin y Nestor Grill, que también estaban
desaparecidos, recibieron por respuesta “En Algo andarían esos chicos…”. Diana
estaba dentro del sindicato Foetra, estudiaba en el Juan XXIII y tenia afinidad
con la JUP (Juventud Universitaria Peronista). Estando secuestrada tuvo
contacto con Horacio Russin y Nestor Grill, quienes se conocían de antes, del
barrio y de la Iglesia de la Pequeña obra, “Eramos todo un grupo de gente que
nos conocíamos”. “A Diana le quedaron secuelas de mucho miedo y posturas que ya
no queres tener más”
La Cuarta
persona que declara es Perla Diez,
Hermana de la Víctima Diana Diez. Relata los hechos, al igual que el testigo
anterior, su esposo, destacando que Diana estuvo 78 días en cautiverio,
sometida a torturas con picana en genitales, con grilletes en pies y manos y
que al asearse debía hacerlo a la vista de los guardias. Aparte de Russin y
Grill con quienes estuvo secuestrada, relata que su hermana le contó de una
persona mayor que era de Punta Alta y de gente de Mar del Plata, muchas de
ellas mujeres, las cuales estaban muy torturadas, con quemaduras. También le
contó que le ponían colirio en los ojos que decía colirio naval y tenía el logo
de la Armada. El lugar lo refiere como una construcción muy antigua y muy húmeda.
Diana tenía 26 años cuando fue secuestrada, quedó con grandes secuelas
psicológicas y falleció en el año 1995, sin recibir la reparación de la
Justicia.
Por la
tarde, en primer Lugar declara Florentina
Rodriguez de Eraldo, madre de Norberto Eraldo “Bocha” desaparecido. Con sus
86 años declara que su Hijo Bocha estuvo 2 veces secuestrado, la primera vez 25
días en el buque 9 de julio en Puerto Belgrano. Pudieron mantener
correspondencia periódicamente con su hijo q era entregada en el destacamento.
La segunda vez que lo secuestran, lo buscan de su casa en calle O’Higgins de
Bahía Blanca de madrugada, y se lo llevan secuestrado “Mama no te hagas
problema, son los mismos que antes, seguro me interrogan y vuelvo” le dijo su
hijo, “No fue así y al mes lo secuestran a mi marido”, dice Flora. Cree que su
marido estuvo también en Baterías pero no compartió cautiverio con su hijo. “Teníamos
la concesión del Hotel Belgrano, ya no sabíamos dónde meternos, a veces
dormíamos en el City Hotel, a veces debajo de un sillón, en una pensión, nos
acarreó muchos problemas”. Cuando su esposo el liberado, se van a vivir a
Buenos Aires. De Bocha Recuerda “Tenía mucha sensibilidad ante la desgracia de
los demás y trataba de ayudar en lo que podía”.
El siguiente
testimonio es Carlos Anselmo Eraldo,
Hermano de Norberto, quien relata la activa militancia a principios de los 70,
que tenía toda la familia dentro de la Juventud Peronista. “Mi hermano indujo
al resto, terminamos militando todos”. Norberto estudiaba economía y militaba
en la JUP y él militaba en la UES junto a Cereijo, Ilaqua y Lofvall, todos
víctimas del terrorismo de Estado. Aparte de estudiar, tenían la concesión del
restaurant y Bar del Hotel Belgrano donde trabajaba toda la familia y
compañeros, era un emprendimiento familiar. Su hermano también vendía sueters,
por lo que viajaba a Mar del Plata a comprarlos y a la vuelta de uno de esos
viajes, es interceptado el colectivo en una razia y allí es secuestrado por
primera vez. En averiguaciones que realiza el padre que trabajaba en la Bace “Espora”
les dicen que estaba en Puerto Belgrano. A los 25 días lo liberan. El hermano
puede contarle que estuvo en un buque, y compartió cautiverio con los hermanos
Giorno y con un sr Jara. Un día su hermano q era 6 años mayor que él, le dijo
que no debía seguir militando, “la cosa viene difícil, y si te agarran la pasás
muy mal, si seguís te rompo la cabeza”. Luego de eso Norberto Bocha, vuelve a
ser secuestrado de su domicilio, por segunda vez, delante de toda su familia y
ellos se van de la casa. No logran averiguar mucho sobre su paradero y también es
secuestrado el Padre, quedando El testigo, solo con su madre y su hermanito de
5 años. Deben liquidar el Hotel Belgrano y luego de dos meses liberan al padre,
quien estuvo dos meses secuestrado, en muy malas condiciones. Vuelve con marcas
en los pies, muy flaco, la cabeza hinchada, una franja blanca en la cabeza
producto de las vendas. Su padre lo advierte “Carlitos por favor cuidate, son
unas bestias, son unos animales, si te agarran te van a destrozar” “Nos contó
las barbaridades que sufrió, lo ataban con alambre del techo, submarino seco,
picana, golpes… uno no puede creer que se pueda hacer algo así…” . En el lugar
su padre estuvo con Patricia Gastaldi, esposa de Horacio Russin quien también estaba
allí, con Diana Diez, Nestor Grill, Gerardo Victor Carcedo (quien estaba muy
mal, muy golpeado), una chica que era gorda y se burlaban de ella, y un
matrimonio que los habían traído del sur, que tenían dos nenas. Su padre supo
que estaba en lo que llamaban Casamatas, al salir reconstruyó junto al padre de
Nancy Cereijo, que era la Séptima Batería, en Punta Alta.
Al salir en
libertad la familia se va de la ciudad y deben vivir lo que podemos decir como
un exilio interno en el que las penurias y necesidades fueron innumerables.
“En realidad
nada de todo esto tendría que haber pasado, pero ya que pasaron quien tendría
que estar acá es mi papa que se murió hace 10 años, él seguramente hubiera
estado muy gustoso, de contar lo que pasó y gustoso de ver que se hiciera
justicia, no tanto con él, sino por poder ver a quienes torturaron y asesinaron
a su hijo mayor que el tanto quería y ver
que de una vez x todas se está haciendo justicia, quizá larga, pero por
él y por mi hermano Bocha, este testimonio representa es que mi viejo sepa que
el legado está intacto y que nosotros seguimos parados acá y vamos a seguir
adelante, porque para atrás no hay camino nunca…”. Su
Hermano Norberto aún continúa desaparecido.
El tercer
Testigo de la Tarde del Martes es Alejandro
Fabián Eraldo, el Hermano más chico de Norberto Bocha Eraldo, quien tenía 5
años al momento del Secuestro de su Hermano mayor y su padre. No tiene registro
en la memoria del primer secuestro de Norberto, sí del segundo que se realiza delante
de toda la familia y lo vive como un momento muy traumático. Recuerda algunas
situaciones y otras las reconstruye, y de su relato se desprende que lo peor
cuando fue creciendo era no poder hablar con nadie de lo sucedido. “Lo que les
transmito es una mirada desde la edad que tenía, lo más duro fue callarse y no
saber que responder ante las preguntas”.
El último
testigo del día Martes es Luis Mario
Sarmiento compañero del conscripto Guillermo Aguilar desaparecido. Junto
con sus compañeros, son los últimos que ven a Aguilar con vida. Ambos eran de Córdoba
y realizaron el Servicio Militar Juntos en Baterías Puerto Belgrano. En Octubre
del 76, todos salen de baja, menos Aguilar. “El único que no salió de baja fue
Aguilar, Guillermo se quedó con un
Teniente que era Lacoste, él lo tenía de la muñeca y él quería como
salir, irse con nosotros y no pudo, lo llevaron para otro lado. Guillermo le
entregó el bolso a un compañero que después lo llevamos a la casa del padre”. “Aguilar
era un chico muy introvertido, tranquilo y pacífico, pero me dio la impresión que
quería venirse con nosotros, pero no se produjo forcejeo…A Lacoste lo veíamos
todos los días”.
El Miércoles 12 de Noviembre declaran 4
testigos durante la Mañana, por la tarde No hubo Audiencia.
El primero
en Declarar fue Hector Osvaldo Gonzalez,
por el caso Eraldo. Ambos eran de Punta Alta, tenían relación por el deporte, por
la militancia en la Juventud Peronista y una relación comercial en el Buffet
del Hotel Belgrano, eran socios. Cuando Bocha es secuestrado, intentan
mantenerlo, pero cuando en Octubre es secuestrado el padre Eraldo tuvieron que
dejar el trabajo. Posteriormente, en Abril del 77 el testigo también es
secuestrado y su caso ya fue juzgado en el juicio con la Causa 982. Estuvo
secuestrado en el Centro Clandestino Baterías y luego lo trasladan a “La
Escuelita”.
El siguiente
testigo es Nuncio Victor Meo, amigo y
compañero de militancia de Norberto Eraldo, quien relata las circunstancias que
precedieron al secuestro y posterior desaparición de la Víctima, con similar
relato que anteriores testigos, al igual que Juana María Reginato, quien era novia de Norberto Eraldo.
El cuarto y
último testigo es Hugo Osvaldo Aguilar,
Hermano del Conscripto Guillermo Aguilar desaparecido, quien dá cuenta de las
gestiones que realizaron sus padres en búsqueda de su hermano. En una
oportunidad, su padre fue amenazado, que si “seguía investigando ellos también
correrían la misma suerte”. “Mi hermano y yo militábamos en la Juventud
Peronista, junto a otros compañeros habíamos formado una Unidad Básica en el
pueblo de Unquillo, hacíamos como de asistentes sociales, relevábamos las
necesidades de la gente pobre y hacíamos gestiones y trámites para proveer a la
gente de lo que necesitara, en lo posible” “Les adoctrinábamos acerca de las
tres banderas del Justicialismo, la Independencia económica, la soberanía política
y la Justicia social, creíamos que con Perón íbamos a profundizar estas
banderas, cuando Vimos que Perón, no seguía ese camino prometido, intentamos
hacerlo x nuestra cuenta e intentamos constituír, lo que se llamó el Partido
Peronista Auténtico q no se concretó por el Golpe de Estado del 76”. Cuenta que
él también fue arrestado junto a 20 compañeros, en Rio Ceballos, entre ellos
Araujo, Junco, Rodriguez, Echarri y otros. El ejército allano su casa y la de
sus padres, buscando a su hermano: “Se ve que no tenían coordinación entre las
inteligencias porque mi hermano ya estaba desaparecido”. Luego vuelve a
arrestarlo la policía de Unquillo y estuvo 2 días detenido. Tuvo que esconderse
hasta que sacó el pasaporte y se fue del país. Los testigos Ruti y Sarmiento,
compañeros de su hermano son quienes les dan la noticia de la última vez que
fue visto Aguilar. “La familia quedó dispersa, mi hermano no apareció nunca más,
yo no pude volver a Córdoba, mi padre se tuvo que quedar quieto por miedo, recién
en el año 1997 regresé a Argentina”
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FIN DE LAS AUDIENCIAS DE ESTA SEMANA,
PROSIGUEN EL DÍA Martes 25 de Noviembre A LAS 9 HS.
Norberto Eraldo. |
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